En el cielo hay un mensaje para tí

Autora :   Doris Sánchez

 

Estos días he estrado recreando mi pasado y sin querer me he  encontrado de frente a momentos específicos en los que no brillé necesariamente por mi inteligencia, he dicho  reiteradamente que no poseo inteligencia  menos para los números que de siempre han sido mi peor enemigo en el ramo académico, a sabiendas iba por las ramas en busca de las letras y así pude salvar muchos obstáculos, la escritura es lo mío, me salen las palabras como manantial que a veces se atasca por el gran fluido que supera la capacidad de desagüe.

Parar no es lo mío, perder el tiempo en tonterías sin beneficio es agobiante y el no tener compromisos sinceramente me estresa, me gusta la gente que me instruye, que me habla de cosas que aumentan mi capacidad intelectual, esas que me hablan de la historia de Galicia o de cualquier otro punto del mundo, es tanto lo que hay en nuestro entorno y que no conocemos,  conforme a ello hablo de cosas  igual no se corresponden con la forma de ver o sentir de los demás pero al menos hablo e intento con ello no  ofender a nadie ni herir sentimientos personales.

Dejar de hacer cosas por falta de inteligencia no tiene justificación, cada día  descubrimos nuevas habilidades, aficiones, aptitudes, vamos cambiando  los sentimientos, los gustos y hasta las preferencias, y si en el camino nos enteramos que cosas de antes siguen ocupando un lugar importante en nuestro presente, es el indicador necesaria para que  le dediquemos más atención y por qué no?? No pasará nada si lo intentamos.

Siempre habrá una vía de escape, una idea o un consejo, habrá gente familiar o no que tendrá respuestas y hasta te allanará el camino para que puedas llegar con más facilidad hacia la obtención de lo que anhelas, si te dijera que cuando quise estudiar Lic. En Derecho económicamente no podía porque a esos años y  con los compromisos familiares no existía la posibilidad de comprometerme con más gastos, la universidad era privada  y por más que yo quisiera, no podía.  Comenté a  mi amigo Jacobo de León  mi deseo  de estudiar y los inconvenientes que me lo impedían, en seguida  me motivó a gestionar un crédito educativo en FUNDAPEC, entidad en la que ocupaba un cargo ejecutivo que yo desconocía, me llevé de su consejo  tramitando toda la documentación y  el día de mi cumpleaños  puso en mis manos un sobre cerrado mientras me decía  ¡¡feliz cumpleaños!!  Ahí estaba la solución, iba a estudiar gracias a la valoración de mis sueños  y al respaldo recibido por ese amigo que nunca jamás podré olvidar porque quiera o no será siempre parte de mi vida por haber jugado un papel muy importante en mi capacitación intelectual y progreso personal.

Todos los estudiantes no cuentan con recursos económicos, recuerdo las facilidades que recibí gracias a la Biblioteca del Banco Central,  de mis propios compañeros que compraban y me facilitaban sus libros para copiar sus capítulos pero eso no lo es todo, el haberme graduado con la promoción anterior a la mía ha sido el resultado de muchas horas de lectura, de coger a veces más asignaturas que las que mi mente y mi tiempo libre (que no tenía ninguno) me podían permitir.  La gente inteligente estudia menos porque capta más fácil el aprendizaje, los que no brillamos con tantas estrellitas somos los llamados copiones, los que llevamos las chuletas, ahora tiempos más modernos para ello, el pinganillo y otros artilugios más modernos le salvan la situación a cualquiera, o le hunden para siempre, todo tiene sus pro y sus contra.

Mamá qué hago? Ahora no brillan  los que más méritos académicos tienen,  resulta que en lugar de engrosar el  currículum ahora tenemos que acortarlos para tener acceso al mundo laboral, ya no se está necesitando a la  gente profesional  o cualificada pero tampoco se está contratando a los que no tienen estudios, la cosa está complicada y me enfada mucho que sigan existiendo los nombramientos a dedo, los enllavismos,  las recomendaciones de….  Que gente sin estudios sea coloca al frente de cargos importantes por encima de gente muy capacitada.  Pese a todo me siento muy orgullosa de tener un título  universitario y levantarme la autoestima mirando el hermoso anillo que llevo en mi dedo fruto de muchos años de pupitre, de gastar mi vista  con tanta lectura y saturar mi mente con tanto aprendizaje, de  sacar provecho de tantos años de secretaria para transcribir todos esos trabajos prácticas que debíamos presentar en clase.  

Con todo lo  antes dicho, sigo motivando a la gente a ir en busca de sus sueños, muchos hacen varias carreras porque les apetece para llevar esos vacíos emocionales guardados en su interior con tanto cariño, si hecho  algo en falta en España es que  me digan Licenciada Sánchez, lo que es costumbre en mi Dominicana natal, que llama a los profesionales por si titulación académica, pero eso no me quita  la seguridad de quién soy.    ¿Cuál es tu sueño por cumplir?? ¿Qué te impide materializarlo?  Mira hacia el cielo  porque allí arriba alguien ha dejado un mensaje para ti, fíjate bien en esa nube que casualmente estará casi colocada encima de tu cabeza, igual te hablará en un lenguaje desconocido pero tu intuición te ayudará a descifrarlo.   En Galicia  pocas veces tenemos cielos muy claros pero cuando puedo apreciarlo me paso muchos minutos del día buscando ese mensaje y por ello he querido decirte que no dejes de lado esas cosas que  llenarán aún más tu vida y te invitarán a sentirte muy especial.

Aprender a bailar ritmos de otros países, viajes, espectáculos con tu artista favorito, conocer una provincia, a tu deportista favorito,  hacer deportes, darte un crucero, aprender informática,  idiomas, pertenecer al un club en especial, ampliar tu circulo de amigos,  aprender diseño, belleza, peluquería, a tejer, pintar, bordar, a nadar, abrirte un blog.......  todo puede ser posible  y   para ello debes dar tú el primer paso o al menos desearlo!!!  Aquí me tienes a mí para apoyarte en todo lo que sea bueno, en agradecimiento a todas las veces que gente  de dentro y fuera  de mi entorno familiar o más cercano me ha fortalecido y motivado a seguir adelante en busca de mis sueños.