El Yoga en mi vida!!!

Autora   :  Doris Sánchez

Quiero compartir con vosotros una experiencia maravillosa que estoy viviendo,  por recomendación médica he empezado a hacer Yoga (tradicional disciplina física y mental que se originó en la India)  que muchas veces escuché mencionar pero  que nunca le presté la menor importancia hasta estos días que para bien he iniciado y me tiene muy entusiasmada.   Es una manera fantástica de conversar con nuestro interior, con nuestro organismo, en especial con nuestra respiración.  Sentir cómo agradecen mis articulaciones que las despierten de un letargo continuado insospechado, sonidos como piezas oxidadas por falta de engrase o  de ser sustituida por una  pieza nueva.  Nos vamos dejando y cada día movemos menos nuestro cuerpo, yo que pensaba que bastaba con bailar merengue pero no, hace falta mucho más y ahora lo estoy comprobando, la parte que menos me gusta es que cuando más relajada me encuentro, se acaba la clase y llego a casa tan relajada que me cuesta trabajo mantenerme en pie, es la droga más maravillosa que pudiese existir jamás!!!

Abrir el corazón y la mente, sentir esa actitud confortante de desprendimiento, el proceso de experimentación del  dolor, la incomodidad y finalmente el triunfo esperando.  Escuchar lo que sentimos, lo que nos aconseja el cuerpo y la fuerza interior, recobrar la alegría, desbloquear nuestra mente y hasta el sistema nervioso que nos lleva a alcanzar una madurez personal, seguridad en nosotros mismos permitiendo brillar nuestra fuerza interior.  Respirar profunda y pausadamente, sin prisas y con un fondo musical que invita al descanso mental tan necesario y que casi siempre obviamos.  Estimular la mente y encontrar soluciones y hasta motivaciones a la vida, a la esperanza y la ilusión, un mundo nuevo que todos deberíamos conocer.

Todo cambia y un antes se transforma en después, lo grande se vuelve pequeño y la mente relajada hasta te permite encontrar respuestas que antes por efecto del bloqueo  no lograbas alcanzar.  Respirar mejor  me ayuda a entender mis necesidades internas, siento más paz interior, mas afinidad conmigo misma, mi cuerpo está siendo reconocido y lo agradece, estoy aprendiendo a darle lo que necesita y juntos alcanzaremos  una convivencia perfecta.