Autora : Doris Sánchez
He tenido la gran suerte de
escuchar estos últimos días palabras muy
motivadora de gente en mi entorno, aunque no te lo
creas los oídos agradecen escuchar lo que tu yo interno piensa pero que no está
seguro porque pudiera ser fruto de tu delirio o imaginación, o de la necesidad
que sientes de escuchar palabras que renueven tu vida, que te inviten a luchar
y seguir adelante sin que nada importe las barreras que encuentres en el
camino. La gente que te quiere o aprecia siempre estará ahí a tu lado sin que importe lo que pase, te tenderá una mano y dará te hará sentir un ser especial porque lo eres, Dios no está visible pero sí muy cerca de nosotros, observa cada movimiento, detalle o palabra, lo que hacemos o dejamos de hacer. "Caminante no hay camino, se hace camino al andar" así decía Facundo Cabral hace muchos años y yo os recuerdo que si detenemos nuestros pasos nos quedaremos con las ganas de saber lo que hubiese pasado de haber seguido caminando.
Hablando con mi "Ada Madrina" y
luego de contarle los últimos acontecimientos de mi vida, yo no podía ni
imaginar que la respuesta recibida ha sido “escribes muy bien, sobre todo con
mucha coherencia” cuando yo ya casi pensaba que superaba los niveles permitidos
de la coherencia y penetrado inconscientemente en el de la incoherencia, como se suele decir en argo popular, que
me estaba volviendo loca pero no, alguien con mucha propiedad me ha dicho esas
hermosas palabras y te digo, ¡¡que me han sentado como una bendición!!
Otras dos personas más por separado me han dicho las mismas palabras, me han recomendado
algo que ya tengo sabido pero que muchas veces no aplico en mi vida por
diferentes motivos, estar hermosa y feliz, disfrutar de la vida y dejar en
manos de otros los motivos de preocupación, es la peor ofensa que se le puede
hacer a quien no te quiere bien, es muy cierto porque no todo el mundo está
preparado para vernos feliz y sobre todo libre de ataduras, el simple hecho de
estar bella y con múltiples compromisos especialmente sociales la verdad que
demuestra felicidad y yo a partir de hoy aplicaré este principio a mi vida, me
voy a reír del mundo porque a veces somos fuertes pero nos descuidamos y
bajamos los índices de protección y así no puede ser.
El fin de semana promete soleado en Galicia y ya me parece estar
viendo a los amantes de las motos volver a pasearse por los hermosos paisajes de esta
linda tierra en tiempos veraniegos, feliz fin de semana para todos.
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