Invitación a mis seguidores

Autora  : Doris Sánchez

Hola a todos, muchas gracias por seguirme  lo que me hace  aún más responsable  y motiva a seguir escribiendo todo lo que me viene a la mente, gracias a  mis seguidores de México que ocupan  el primer lugar de mis seguidores  en cantidad y a todos los demás países que cada día aumenta  en visitas a este blog.  Sinceramente les digo algo, creen que merezco que me sigan?? es que no soy ni escritora ni periodista, pero seguro tengo una cosa, que todo el mundo debería abrir un blog, estoy convencida que mucha gente que cae en depresión  encontraría una alternativa que cambiaría su vida, hay tanta gente sola, sin amigos ni familiares, que no salen de casa, que están distantes del mundo aunque el mundo esté en torno a ellas.

Quiero compartir con vosotros  el nacimiento de  mi segundo blog  titulado "Crisantemos"  http://blogs.elcorreogallego.es/dorissanchez, gracias a la confianza depositada en mí por El Correo Gallego   en su edición digital (www.elcorreogallego.es) que no ha puesto limitaciones para  permitir que  sea  original y espontánea como siempre he sido y la motivación que  agradeceré siempre, es una gran responsabilidad que espero cumplir de la mejor manera.  Este ha sido un regalo maravilloso que agradeceré por siempre, es una valoración  y un reconocimiento  que merezco pero que no esperaba.

Cada día pienso en vosotros especialmente en  los temas que puedan ser de vuestro interés, por favor dejadme sus mensajes en los artículos o escribidme a  dfannysm@hotmail.com y os aseguró que responderé tan pronto como me sea posible.

El tiempo tiene todas las respuestas, cuando las palabras ya no son necesarias llegan los hechos para callar voces,  gracias por estar ahí y  de alguna manera responder a mis buenas intenciones.

Os recuerdo que la vida está envuelta en papel de regalo o de periódico,  que es impredecible y que igual nos aporta alegrías o tristezas, que todo es una prueba continua y es de valientes seguir hacia adelante, los sueños  son parte de los objetivos y han que extender el brazo muy alto, todo lo que se pueda para poderlos alcanzar.

No me gusta la gente que se rinde y se declara en retirada, la que no aspira a más y piensa que ha llegado a la meta sin apenas haber empezado a andar.  Hay gente esperando en la meta para aplaudir o censurar, pero los que más nos importan  (la gente que nos quiere bien) son la fuerza motora que nos habrá de impulsar como si fueran los resortes de un viejo sillón  que pide a gritos una reparación.